martes, 24 de mayo de 2011

reflexión bloque 5

      Bueno! pues se acercó la que espero, sea mi última entrada en el blog, o por lo menos la última de este curso!!!

       Y para finalizar os voy a exponer la última reflexión de este último tema; las transmisiones orales.

       Ya en la anterior entrada según he comentado la evaluación a mis compañeros he expresado más o menos lo que para mí ha significado este bloque.
       He de decir que de todos los que hemos visto es el que más me ha gustado, pero por que aparte de aprender, (como he hecho en todos los demás bloques) me he divertido y eso es algo que motiva más si cabe.

       Este bloque me resulta, digamos, más llamativo por que ha sido práctico, y sinceramente, me habría gustado que la actividad que hemos hecho, en vez de hacerla por grupos, la hubiesemos hecho en clase de uno en uno. Se que ahora lo estoy diciendo en frío y que supongo que si la profe hubiese dicho esto me habría llevado las manos a la cabeza, por que me pongo superhipernerviosa hablar en público, pero luego sé que me suelto, y si vas hacer algo que te gusta y que llevas bien preparado, puede salir genial. Además pienso que esto nos habría servido más para nuestra futura profesión como maestras; habríamos sabido los fallos que teníamos, cosas que nos faltasen para saber hacerlo mejor etc... por que de esta manera, lo que hemos hecho es contarlo como creíamos que estaba bien, pero sin el respaldo de la profe para que ella te corrija... eh! pero que estoy muy contenta con lo qeu hemos hecho también! simplemente... doy una idea! :)

       Por otro lado, he de reconocer que conocer las transmisiones literarias, me ha resuelto unas dudillas que tenía cuando no sabía muy bien de que iba todo esto. Lo digo porque, como supongo que a muchos de nosotros nos ha pasado, casi casi no sabíamos diferenciar, por lo menos, entre narración con libro y lectura, porque si te paras a pensar, parece lo mismo...pero no! Cada cosa tiene su truco XD.

        Asi que por todas estas cosas y muchas más que he aprendido en esta asignatura, me siento supercontenta y medio realizada como futura profe, y digo medio, porque sé que todavía me queda mucho por aprender ya que mis conocimientos sobre muchas cosas que no tenía ni idea han aumentado positivamente, pero aún faltan cosas por averiguar y por sorprenderme más.

Bueno chicos, creo que queda terminado mi blog, espero que os haya servido para aprender sobre cosas y para tomar nota de alguna curiosidad que desconocíamos, como a mí me a pasadao.
Por lo tanto con esto y un vaso de leche.... creo que.... hasta el año que viene!!!!!! XDD

actividad bloque 5.

       Bueno, para finalizar este bloque, la profe nos propuso llevar a la práctica todo lo que habiamos dado es decir, preparar una narración con libro, un cuentacuentos y una lectura, asike nos pusimos manos a la obra!

        lo primero que hicimos fue distribuirnos en grupos de tres toda la clase, así, cada componente del grupo tenía que prepararse una cosa cada una. 

        En mi grupo estabamos, Rocío, Laura Resa y yo, asi que hablando entre nosotras nos pusimos de acuerdo y la distribución de las transmisiones quedó así.
Laura: narración
Rocío: lectura
Yo: cuentacuentos.

        Cuando llegamos al aula nos pusimos todos en distintas partes de la clase, cada una con su grupo y empezamos a contarnos nuestras historias. luego a medida que ibamos acabando, nos ibamos cambiando de grupo, procurando no coincidir los cuentacuentos con los cuentacuentos, las narraciones con las narraciones y las lecturas con las lecturas. Así de esta manera, podíamos escuchar los diferentes cuentos y comparar como lo hacían unos y como lo hacían otros.

        Empezando hacer mi valoración de esta actividad, he de decir que me sorprendió bastante la entrega de cada uno a la hora de contar las historias, puesto que yo iba con el presentimiento de que la gente seguramente no se lo había preparado bien o que incluso, igual, hasta pasaba del tema. Pero cual fue mi sorpresa, que a la hora de escuchar a mis compañeros me quedaba alucinada con lo que oía y veía. Por su parte, según pude apreciar yo, note interés incluso ilusión y ganas por contar sus cuentos, y eso fue algo que me hizo bastante gracia, puesto que incluso, los que estabamos oyendo, nos comportabamos como niños pequeños haciendo preguntas tontas para ver como reacionaba la que lo contaba XD asique estubo muy bien.

        Por otra parte y ya evaluando a la gente a la que escuché, he de decir que a mi parecer, creo que estuvo (según lo que se que hay que hacer en cada caso) todo bastante acertado. Con esto me refiero a la expresión de las compis a contar el cuento, el entusiasmo, la entoncación en cada frase de alegría o tristeza, la expresión de la cara o incluso los cambios de voces que hacían. Es que, sinceramente, de la gente con la que tube la oportunidad de intercambiar los cuentos, no puedo decir nada negativo. Por supuesto que las cosas se pueden mejorar, y eso se hará con el paso del tiempo; pero para ser la primera vez que mis compañeros y yo hacemos esto, he de decir que la sesión del otro día, estuvo genial y espero que se repita algún día!!

                                                   *****************
       Por cierto, si algún curioso quiere saber lo que conté yo, aquí abajo os dejo el cuentacuentos que escogí. 
       Tengo que decir que hasta el día anterior de la "exposición" no tenía ni idea de que iba a contar, y por más que miraba y miraba no me gustaba ninguno como para contarle y más sabiendo que le quería hacer desconocido (por si acaso la gente se me aburría contando el típico cuento) y de pronto me acordé de mi abuela y de cuando yo era peque y dormia con ella jeje, y me acuerdo de que cuando no me quería quedar dormida, me contaba este cuento... Entonces me puse a buscar en internet a ver si venía sin ninguna esperanza, todo hay que decirlo, y cual fue mi sorpresa, que lo encontré, y me hizo una ilusión y me trajo unos recuerdos...!!!
asique aquí os lo dejo!

       
Hace un montón de años hubo un pueblo, muy, pero muy pequeño en el que vivían dos hombres que se llamaban Nicolás.
Uno era rico porque tenía 4 caballos y el otro era pobre porque sólo tenía uno. Así que decidieron llamar al rico Nicolasón y al pobre Nicolasín.
Sucedió que uno de los caballos de Nicolasón entró en la huerta de Nicolasín y se comió todos los repollos. Nicolasín se enfadó y le arreó al caballo una patada.
Nicolasón, que tenía un genio endemoniado, se fue a donde estaba el único caballo de Nicolasín y le pegó una pedrada que lo mató.
El pobre Nicolasín le quitó la piel al animal y, después de secarla y curtirla, la metió en un saco y se fue a venderla al mercado. Yendo hacia allí le cogió un aguacero tremendo y, corre que te corre, se fue a refugiar a un pajar que estaba en lo alto de una casita.

Se tumbó en el suelo poniendo bajo su cabeza la piel del pobre caballo y se puso a mirar por unas rendijas que había entre las tablas del suelo.
Desde allí vio que la granjera estaba comiéndose un pollo en compañía de su hermano el cura, y oyó llegar al granjero, que no podía ni ver a su cuñado.
-Hermano, escóndete en este armario, que si te ve mi marido se va a molestar- dijo la granjera.
Mientras, ella metió el pollo al horno.
En eso, apareció el granjero en el pajar, vio a Nicolasín y le invitó a comer a su casa.
El hombre aceptó encantado, pero al ver que la granjera sólo sacaba un plato de sopa, se le ocurrió decir:
En este saco llevo un duende que dice que en el horno hay una comida muy buena..
La mujer no tuvo mas remedio que sacar el pollo y, mientras comían, le preguntó el granjero a Nicolasín:
-¿ Por qué no le dices al duende que nos enseñe al diablo?
Nicolasín dijo algo en la boca del saco y contestó:
- Dice que lo encontraremos vestido de cura, metido en el armario que está al lado del horno.
El granjero abrió el armario, vio a su cuñado y exclamó:
- ¡Es verdad! y además se parece a mi cuñado. Oye, te ofrezco una bolsa de oro por ese duende tuyo, pero debes tirar el armario con el diablo al río.


Iba ya Nicolasín con el armario a cuestas camino del rio, cuando el cura se asomó por la puerta y le suplicó:
- Si me dejas huir te daré otra bolsa de oro.
Nicolasín aceptó encantado y regresó a su pueblo con los bolsillos llenos.
- ¿De dónde has sacado tanto dinero- le preguntó Nicolasón.
- De la venta de la piel del caballo que me mataste.
Nicolasón se lo creyó, mató a sus cuatro caballos y pidió en el mercado dos bolsas de oro por cada piel.

Todo el mundo se burló de él y, lleno de rabia, cogió a Nicolasín, lo metió en un saco y fue a tirarlo al río. Pero por el camino le dio una sed tremenda y entró en una taberna dejando el saco en la puerta.
- ¡Ay! se quejaba Nicolasín dentro del saco- Aún no tengo ganas de ir al cielo.
Yo sí que tengo ganas - dijo un viejo pastor que pasaba por allí.
- Te cambio el puesto.
- Encantado. Pero por favor ocúpate de mis vacas - dijo el anciano.
El Pastor sacó a Nicolasín del saco y se metió él dentro.
Al salir Nicolasón de la taberna, tiró el saco al río. Ya se dirigía a su casa, cuando encontró a Nicolasín con dos hermosas vacas.

Pero hombre, ¿de dónde has sacado esas vacas tan hermosas?
- Del fondo del río. Me parece raro que no sepas que allí hay unos prados estupendos.
Nicolasón que seguía creyen do lo que le decía su vecino y sin acordarse de los cuatro caballos que sacrificó, empezó a ver vacas pastando en los prados debajo del agua, se dirigió al río y se tiró de cabeza con tan mala suerte que cayó en un remolino y... nadie pudo salvarle.

y colorin colorado así termina la historia de Nicolasín el listo y Nicolasón el bruto.
       

lunes, 23 de mayo de 2011

TEMA V


FORMAS DE TRANSMISIÓN LITERARIAS

En este apartado, lo que vamos a ver son las maneras de transmitir cuentos, pero de manera oral. Son tres, y cada una de ellas tiene sus variantes: los cuentacuentos, la narración con libro, y la lectura. Ahora lo que vamos a ver son las características de cada uno.

        CUENTACUENTOS.
Es la base de los cuentos folclóricos. También tenemos que decir que es la más antigua, puesto que hace muuuuchos años, la gente transmitía estos cuentos de manera oral ya que no sabían ni leer ni escribir.
De lo que trata esta transmisión es en narrar un cuento literario y tiene que ser de ficción. Uno de las cosas características que tiene, es que para contar estos cuentos, no se tienen referencias visuales, es decir, no se enseñan dibujos, por lo tanto la imaginación de quién lo escucha, corre libremente en la cabeza de cada uno.
Es por ello que uno de los objetivos principales del cuentacuentos es que los receptores desarrollen su imaginación, por que los niños de ahora, lo único que hacen es ver imágenes todo el rato, y no imaginan nada.
También, los cuentacuentos tratan de contar historias que los niños no conocen para que ellos se las imaginen enteras.

Estos cuentacuentos se han puesto de moda entre los adultos (4ª pared) y no tiene por qué que ver con los cuentos infantiles. Esta gente son jóvenes actores que se aprenden los cuentos y los sueltan como si fuese un monólogo. Su contenido, al igual que el infantil, es de ficción y lo sueltan con gestos, movimientos, entonaciones, cambiando el volumen de la voz, poniendo voces… pero no tienen por qué ser de infantil. En este caso, de dedican a escenificar cuentos o historias tanto para gente más adulta, como para niños pequeños (cuentos de sala)

Aquí os dejo un video en el que podréis ver con más detenimiento a qué es esto de la Cuarta Pared.


El cuentacuentos, tiene que cumplir la función de desarrollo oral, las entonaciones y las funciones orales. El hilo es otra de las cosas que tiene que estar claro en el desarrollo del cuentacuentos; y según vayan reaccionando los espectadores, así tendrán que ir recreando el cuento. También, a medida que se va contando el cuento, el emisor, tendrá que saber, que puede que haya cosas que se desconozcan de algo del cuento, por lo tanto tendrá que explicarlo  de la manera más coherente y siguiendo con el tono de entusiasmo para no perder el interés de los oyentes.

En un cuentacuentos tenemos que dialogar con el público, se pueden hacer preguntas para que los niños participen. Al igual que los niños puedan preguntar cuando tengan alguna duda, vigilando siempre al típico egocéntrico que no para de hablar; en ese caso se le tendrá que cortar de la manera más sutil a la vez que tajante posible. 

Cuando tengamos que describir algo de la historia, un protagonista, su hogar, el pueblo, la ropa… se tendrá que hacer de manera incompleta y sin dar muchos detalles para que cada niño se imagine cada cosa a su manera.

Para contar un cuentacuentos es primordial ser expresivos, tanto si se está sentado como si se está de pie. Se puede ser expresivo con el cuerpo, con las manos, con los ojos, con el tono de voz…
Respecto a la voz, tengo que decir, que sí, se pueden cambiar las voces de los distintos personajes, pero hay que tener en cuenta, que en un cuento en el que existen varios personajes, es muy difícil tener un repertorio de voz de cada uno, por lo tanto es mejor, en el caso de que haya muchos personajes, no cambiarles de voz, simplemente el tono, y cuando hay pocos y te ves capacitado para hacerlo, pues cambiarles la voz y aguantar toda la obra.

UNA COSA A TENER EN CUENTA ES QUE EN LOS CUENTACUENTOS, SE CUENTAN CUENTOS, (COMO SU PROPIA PALABRA INDICA) NO SE LEEN CUENTOS, NI SE NARRAN CUENTOS.



LAS VARIANTES DE LOS CUENTACUENTOS:
-  Marionetas: hay que tener en cuenta, que un cuentacuentos es contar cuentos, no hacer un teatro. Por lo tanto, si usamos alguna marioneta, será para hacer que sea esa marioneta la que cuente el cuento. No para hacer que sea un personaje.
-  Disfraces: la profesora se puede disfrazar por ejemplo de hada de los cuentos cada vez que vaya hacer un cuentacuentos, o a lo sumo, se puede poner algún abalorio del protagonista, es decir, si el cuento va de payasos, se puede poner una peluca y una nariz de payaso, o se va de cocineros, pues puede ponerse un delantal y un gorro de cocinero… es decir, dar un poco de ambiente al asunto para que a los niños les resulte más curioso todo, digamos que sería para que les resulte más mágico, más espectacular.
También para ayudarnos con la ambientación, se pueden usar materiales como velas, humo, música, olor… todo es para dar un toque de magia a la situación, no para favorecer la comprensión de lo que se vaya a contar.

-  Por otro lado, tenemos la declamación que es recitar un poema. Esta clase de cuentacuentos tiene como característica que son literalmente contados, porque si no, perderían su gracia,

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        NARRACIÓN CON LIBRO:
Como mayor característica, implica tener un libro y contar ese libro enseñando los dibujos.
Lo primero que tenemos que hacer es una introducción del título. Aquí no estaría de más preguntar a los niños si lo conocen, si saben lo que significan y también que nos cuenten un poco que idea tienen sobre de lo que puede ir el cuento.

Otra de las características fundamentales de esta transmisión es que la cosa está en contar el cuento pero con tus palabras y a la vez apoyarme de las imágenes que hay en ese cuento.
Puede ocurrir que haya una historia en un libro pequeño que nos guste mucho y lo queramos contar pero las imágenes se ven muy pequeñas, entonces para que los niños no se molesten unos con otros lo que podemos hacer es escanear las imágenes en grande o si no hacer una presentación con el power point para que todos los puedan ver mejor.

En este tipo de narración podemos interactuar con los niños, preguntándoles sobre qué es lo que están viendo en esos dibujos para así involucrarles en el tema y captar más su atención.

La narración con libro es una de las cosas más típicas que se da en 1º ciclo, ya que los niños son pequeños, tienen menos conocimiento y las imágenes lo que hacen es ayudar a comprender si el prota está triste o contento, alegre, o cansado…

Esta es una lectura que trabaja el razonamiento icónico, es uno de los grandes avances para que acepten, atiendan, y respeten cosas que representan la realidad pero que no son la realidad. Esto quiere decir que por ejemplo si yo les enseño una foto de su profesora a los niños, y les digo esta es la profesora Irune, ellos tienen que saber que eso es una fotografía que representa a la profesora, no que sea la profesora.

La narración con libro y el cuentacuentos son las cosas más utilizadas en infantil tanto para que el niño tire de la imaginación como para que disfruten y se lo pasen bien.

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        LECTURA:
Esta transmisión de hace mejor a partir del segundo ciclo, puesto que a no ser que sea un texto corto, una lectura puede llegar a ser aburrida ya que no hay interacción con los niños. Por esto mismo se hace con niños más mayores, porque si se haría con los más peques, a los cinco minutos estarían cada uno a los suyo. Sí que podemos leer un cuento muy cortito o un cuento muy cortito y gracioso, así de esta manera a los niños peques se les tiene “enganchados” y no se entretienen con otras cosas.

 Con esta forma, estamos dando  un modelo lector juntos, que es, que escuchen como se lee.
Para hacer esto, es necesario tener un libro con o sin imágenes da igual.
Para que una lectura no se haga muy pesada en segundo ciclo, no vamos a estar todos los días leyendo y dejando atrás la narración con libro y el cuentacuentos, si no que se podrá alternar con éstas para que los niños no les resulte tan monótono.

La manera de leer estos cuentos es leyendo directamente sobre el papel, o leyendo y enseñando las ilustraciones, o leyendo y después enseñando los dibujos para así dejar correr durante un tiempo corto la imaginación de los niños. La diferencia que tiene esto con la narración, es que en este caso no se explica nada de las imágenes a los niños.

La lectura, al igual que todo, tiene que ser expresiva pero no exagerada. Pausada, pero con entonación. Se tiene que leer adecuadamente para que los niños entiendan lo que se les está contando y como requisito que también le diferencia del cuentacuentos y de la narración es que aquí, no se hace cambio de voces.



Hay que dejar claro que antes de ponernos a contar y antes de leer cuentos, se puede hacer una ambientación previa.
Una vez contado o leído el cuento, no se tienen que hacer preguntas a los niños, puesto que esto siempre lo hacemos para que ellos pasen un buen rato y es por ocio y disfrute.
Sin embargo, podemos hacer preguntas subjetivas en plan: ¿os ha gustado? ¿Lo que más os ha gustado? Y ¿lo que menos?... cosas así.
Puede ocurrir que los niños nos pidan una y otra vez que les contemos el cuento y esto puede ocurrir por dos cosas, o bien porque les ha gustado mucho, o bien como dato curioso, es porque se han quedado con la idea principal y se han puesto a imaginar cómo será el final y han perdido el hilo de la historia. Esto es un proceso interno de cada niño.

Hay que tratar estos momentos sean como un regalo que se da a los niños, no como algo impuesto,  algo que están obligados hacer. los niños se lo tienen que pasar bien y tienen que disfrutar con lo que estan escuchando.


REFLEXIÓN BLOQUE IV.


           Bueno, bueno, bueno, se va acercando el final de curso y aquí seguimos, en la asignatura de literatura aprendiendo cada vez más y más.
           Hay que decir que estoy bastante sorprendida con todo lo que desconocía sobre las muchas cosas que hemos visto a lo largo de este bloque, y de todos los anteriores
          Pero ciñéndonos a este tema, he de decir que lo que he aprendido del folclore, me ha resultado fascinante, puesto que yo apenas conocía nada sobre este tema, es decir, si sabía que cuando se hablaba de folclore, se podían referir  bien a teatro o bien a literatura… pero no sabía a qué tipo en concreto.

            Cuando he realizado este bloque, de verdad que he hecho un viaje imaginario y no sé por qué, me he remontado a la edad media viendo cómo un grupo de jóvenes hacían los teatrillos en la calle, o como los niños se sentaban en el suelo escuchando títeres de cachiporra, o incluso me he llegado a imaginar como los hermanos Grimm Viajaban de un lado para otro en busca de historias para luego hacerlas suyas y crear unas nuevas.

            Pienso que me he involucrado mucho en este tema, puesto que cada vez que hacía una entrada nueva no podía dejar de mirar en internet notas curiosas de los autores y he de decir que cuando he visto los libros que escribieron cada uno me he sorprendido al recordarlos y saber qué libros era de quién.

            Pienso que es bonito tener todo esto siempre en mente, puesto que a medida que crecemos pasamos más del tema e incluso olvidamos ciertos cuentos o ciertas historias que no deberían ser olvidadas.
            Si me pongo un poco melosa, tendría que dar las gracias a esta asignatura por hacer volver esos recuerdos de cuando yo era pequeña y disfrutaba leyendo o viendo las ilustraciones de cuentos como los tres cerditos, caperucita roja, o videos de Disney de Cenicienta o de la Bella durmiente.
            Pero claro, eso es hace muchos años y mirando hacia el presente y hacia el futuro, he de decir que me produce un poco de pena que los niños de hoy en día apenas crecen con estos cuentos, o con estos juegos, como por ejemplo el corro de la patata. Tú vas por la calle, o vas a un parque, y no ves a los niños jugando a la rayuela, o a la comba… les ves jugando al futbol, con las maquinitas… o directamente no salen y se quedan en casa pegados al televisor o al ordenador, esto es muy tajante, pero es que es así y a medida que pase el tiempo, pienso que todo irá a peor, y las cosas bonitas como los cuentos, los teatrillos del retiro por ejemplo, o juegos en común como los que he nombrado, pasarán a la historia, y serán simples cosas de abuelos que cuenten a sus nietos.

            Por otro lado y para finalizarla reflexión de este bloque; hablando sobre la adaptación del cuento, he de decir que a la hora de adaptar no sabía que se tenía que tener tantas cosas en cuenta. Según hacía las entradas, me daba cuenta de que una historia, puede tener varias versiones y cada una de ellas contada por un autor diferente.
            Creo que he aprendido hacer una adaptación de un cuento folclórico como es Toda Clase de Pieles, y digo creo, porque, mi adaptación no cuenta su historia, es decir, tiene el mismo tema; (una princesa huye de palacio escondida con una manta, y se va a vivir a otro sitio durante mucho tiempo. En ese lugar, crece y empieza a desenvolverse por ella misma. Conoce a un príncipe y se casan). El hilo de la historia es el mismo en los dos casos. Pero en el cuento que yo he realizado he cambiado totalmente la historia dejando la infancia, el viaje iniciático y la boda, intactos. Ya que pienso que para hacer una adaptación puedes cambiar lo que más te parezca siempre y cuando guardes las reglas básicas de las que se compone una adaptación como son las que acabo de nombrar, o los roles de los personajes etc…

            Por lo tanto y teniendo en cuenta todo lo que aquí acabo de nombrar mi reflexión es positiva y en mi futura profesión como maestra, aparte de dar a los niños una buena educación intentare fomentar entre ellos, cosas que me parecen importantes en la vida de toda persona, como los cuentos, los juegos, los teatrillos etc... Folclóricos, ya que me parecen un punto característico de nuestro crecimiento.

BLOQUE 4--> MI ADAPTACIÓN LITERARIA


Llegando a los últimos días de curso, la profesora Irune, nos contó un cuento llamado Toda clase de pieles. Y nos dijo que basándonos en esa historia, hiciésemos nosotros nuestra propia adaptación de ese cuento. Así que, aquí os dejo mi obra. ¡!A ver si os gusta!!
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Había una vez, en un país muy lejano muy lejano, vivían unos reyes con sus dos hijas Margarita y Paulina un bebé precioso de apenas 4 meses de vida. Los reyes también vivían con la madrina de las niñas, una mujer encantadora,  mayorcita, y toda una dulzura que vivía por y para las niñas. Llevaba en sus vidas desde que Margarita (la mayor) apenas tenía días y siempre había sido muy buena cuidándolas y mostrándolas todo su amor, puesto que para ella, era como sus hijas.
Margarita era una niña de 13 años de edad, preciosa, con el pelo rubio como el oro y su tez blanca como la nieve.  Los cuatro, junto con la madrina,  vivían muy felices, el pueblo adoraba a su monarquía, y todos querían a las pequeñas princesas, puesto que además de guapas, eran muy dulces y simpáticas con todos los habitantes del pueblo.
Un día Margarita pidió permiso para jugar con la pelota por las calles del pueblo y a la madrina no la pareció mala idea, asique la dejó siempre y cuando no se alejase de palacio.
Pero Margarita era una niña muy traviesa y no paraba quieta ni un momento. Estaba jugando por las calles ella sola cuando de repente, la pelota con la que disfrutaba, se le cayó dentro del patio de uno de los vecinos. Pero cuál fue la casualidad, que precisamente, ese vecino, era el peor vecino de toda la comarca. 

Resulta que este hombre, que tenía por nombre Rufus había tenido serios problemas con el rey por temas de comportamiento con los demás vecinos, mala educación… llegando incluso a las manos con el propio rey o con algún habitante. A causa de esto estuvo encerrado en los calabozos muchos años, hasta que el propio rey se apiadó de él y le concedió la libertad, poniéndole como único requisito, que viviese en la última casa del pueblo que era la más alejada  y que evitase el contacto con el resto de la gente del pueblo, porque de lo contrario, su castigo sería la soga.
Rufus juró que tarde o temprano se vengaría, pero nadie le tomo la palabra… hasta este día…


Margarita, al ver que su pelota se colaba en la casa de ese vecino del que ella desconocía toda la historia, se decidió a entrar para recuperarla, pero cuál fue su sorpresa que nada más entrar, la puerta se cerró de golpe a sus espaldas. A Margarita la entró un escalofrío. La casa era oscura, siniestra, llena de polvo y de chismes rotos y sucios.
-     ¿Hola?- preguntó Margarita con la voz temblorosa. He venido a recoger mi pelota, no quiero molestar… ¿hola?- Insistió.
En esto apareció una sombra delante de ella, llevaba puesto una capa raída, su cara estaba manchada de hollín, la barba que le caía estaba despeinada y muy mal cuidada. Vestía con un pantalón oscuro, y una camisa de cuadros oscura también, en los pies, lo que parecían unas botas de goma rotas y llenas de barro… Margarita al ver al hombre que apareció de la nada quiso gritar, pero el miedo la paralizó.
-        No grites niña. No quiero hacerte daño- Dijo entre risas el hombre de negro- Tan sólo quiero que seamos amigos, ¿por qué no te sientas?
Martina retrocedió unos pasos y se negó. Esto le sentó muy mal a Rufus, quién la cogió del brazo y la obligó a sentarse en una de las sillas de lo que parecía, podría ser la cocina.
-        Verás Margarita, ¿Por qué es ese tu nombre verdad? Estado esperando mucho este momento, y por fin a llegado- comenzó a decirle muy altivo.
-        Lo siento señor, yo no le conozco de nada, sólo quería recuperar mi pelota y marcharme, no quería molestarle.- acertó a decir Margarita.
-        Con que quieres tu pelota ¿eh? ¡Pues que pena que se haya pinchado!- Le contestó Rufus señalando la pelota.
                         A Margarita se la abrieron los ojos como platos al ver su pelota pinchada por un punzón.
-        ¿Por qué ha hecho eso? ¿Por qué ha sido tan malo?-  dijo Margarita con lagrimas en los ojos.
El malvado hombre se echó a reír con una risa maléfica que asustó aún más si cabía a Margarita.
-      ¿Qué por qué soy tan malo? Jajajaja, y ¡más que puedo llegar a ser! jajaja

                         Rufus le contó toda la historia a Margarita, quién quieta e inmóvil en la silla,  no paraba de llorar.
-        ¿Y qué quieres que haga yo? Yo no tengo la culpa de los errores que tú hayas cometido, déjame marchar ¡por favor!- Suplicó Margarita.
-        ¡Oh!, por supuesto que te dejaré marchar- dijo riéndose de ella-. Pero mañana tú vendrás conmigo y nos iremos muy lejos de aquí. Lo tengo todo preparado, sólo estaba esperando este maravilloso día jajaja.- volvió a reírse Rufus lleno de ira y alegría a la vez.
-        ¿Cómo que mañana, me iré contigo? Ni hablar, ¡en cuanto salga de aquí, toda la guardia real vendrá a buscarte y acabará contigo!

                         Rufus paró en seco de reírse, se la acercó a la cara y mirándola fijamente a los ojos la explico exactamente lo que tenía que hacer en cuanto saliese de su casa. De lo contrario y si hacía algún movimiento extraño juró matar a toda su familia e incluso a su hermana pequeña.
-  Esta noche, dejaré que veas a tus padres y a tu hermana por última vez. Asique aprovecha bien la oportunidad que te doy, porque de lo contrario… A cambio mañana tendrás que estar aquí a primera hora de la mañana.
Rufus la dijo que se pusiese una manta por encima y unas alpargatas sucias que encontrase por donde fuese para pasar desapercibida y que los guardianes la confundiesen con una campesina del pueblo.
                        
                         A Margarita no le quedó otra que aceptar lo que le había dicho Rufus y con toda la pena del mundo se dirigió hacia su palacio con lágrimas en los ojos.
                         Esa noche sin decir nada a nadie, metió en un saco todo lo que pudo de ropa y un vestido que la habían regalado sus padres para cuando fuese mayor y contrajera matrimonio con otro príncipe,  de color plateado y brillante, digno de una princesa.
                         A la mañana siguiente, temprano, besó a sus padres y a su hermana sin que se enterasen  y entró en el cuarto de la madrina para cerciorarse de que seguía durmiendo.
                         Al comprobar Margarita que no la seguía nadie, salió del palacio desconsolada, cubierta por una manta sucia y unas zapatillas rotas y llegó a casa de Rufus. 
-        ¿No habrás dicho nada a nadie, verdad? ¡De lo contrario sabes lo que puede pasar!
Margarita le miro con tristeza y le contestó que no.

Ese día empezaron su camino juntos, un camino muy, muy largo que a Margarita la separaría para siempre del calor de su hogar.

Se instalaron en una casa que había ido construyendo Rufus en lo más recóndito del bosque. La casa era de adobe y con el tejado de paja. Iba a esa casa 3 veces por semana puesto que tenía un huerto pequeño donde había sembrado distintas verduras, y un corral con animales como ovejas, gallinas, caballos, vacas… (claro está que todos esos animales les había robado del pueblo poco a poco) y tenía que cuidar de todo.

Cuando llegaron Rufus le ordenó a Margarita que se pusiese unas ropas raídas y sucias de su talla, y la obligó a que se manchase el pelo y la cara para que no pareciese una princesa. Margarita acataba todas las órdenes que le decía Rufus, siempre bajo la amenaza de que si no lo haría, su familia sería la que pagase las consecuencias.
Tenía que fregar, limpiar, ordeñar, coger los alimentos del huerto… Rufus convirtió a esa dulce princesa en una pobre campesina, sucia y trabajadora.

Por otro lado, todos en el pueblo se pusieron a buscar a Margarita por cielo y tierra, sus padres estaban desconsolados y para la madrina fue tal la decepción que tuvo con ella misma, que después de buscarla decidió abandonar ese reino en busca de otro lugar, puesto que no podía con la pena y la culpa que arrastraba.
La búsqueda duró días, semanas, meses… años y finalmente después de mucho buscar, dieron a Margarita por muerta.
Los reyes se sumieron en la más profunda tristeza, pero siguieron adelante por su otra hija Paulina y el pueblo sin dejar de olvidar a aquella dulce niña, volvieron a sus vidas.



Habían pasado ya muchos años y esa niña pequeña creció y se convirtió en toda una mujer muy bella, con su pelo rubio precioso y más morena de piel, pero con un tacto suave. Sabía cocinar, lavar, cuidar de los animales, recoger frutos del campo…
Seguía viviendo con Rufus en aquella cabaña alejada de su país. En más de una ocasión había intentado huir, pero le fue imposible, puesto que siempre se perdía y Rufus siempre la encontraba. Él lo tenía todo bien planeado, y como sabía que no podía escapar, Rufus la dejaba que se moviese por donde quisiera pero tenía que estar a sus horas de comer y de cenar en casa, si no el enfado era tan grande que la dejaba sin comer y encerrada en una habitación todo el día sin salir.

Un día Margarita se encontraba lavando la ropa en un pequeño riachuelo cuando a sus espaldas notó que algo estaba demasiado cerca de ella. Se giró y de repente, vio a un chico alto, esbelto, guapísimo y con los ojos de un color miel que hicieron que su corazón palpitara tan deprisa que apenas podía respirar.
-¡Hola!- dijo el caballero. -Mi nombre es Leo, soy el príncipe de Cambolia, y paseaba por aquí en busca de algo para cazar. ¡Qué suerte que te haya visto y no te haya lastimado!,
Margarita era incapaz de quitarle la vista de encima. Era la primera persona a la que veía después de muchos años y además era el príncipe más bello que jamás había soñado.
- ¿Está todo bien, pareces asustada?- le preguntó a Margarita.
- Si, si, ruego me disculpéis su alteza, estaba aquí tan concentrada que me asusté al oíros- acertó a contestar Margarita.
- Es muy raro ver a una muchacha  tan sola  y tan guapa como tú por estos parajes tan lejanos de todo el mundo,- afirmó el príncipe.- ¿cómo te llamas? Y ¿qué haces aquí tan lejos?- le preguntó con intriga, e interesándose por ella.
-Margarita, me llamo Margarita. Y bueno… pues yo… estoy aquí… yo… es que…- Margarita no sabía si contarle la verdad o mentirle para que el joven príncipe no corriese peligro, pues si se enteraba Rufus, de seguro se enfadaría y algo malo le haría.
Cuando Margarita se decidió a hablar, de pronto a lo lejos, oyó la voz de Rufus que preguntaba por ella. Margarita se asustó y echó a correr diciéndole al príncipe que huyera y que no la persiguiese que si no correría peligro.
El príncipe, no quería dejarla e insistía en acompañarla.
-     Pero, ¿por qué no me dejas ir contigo?, ¿qué es lo que ocurre?, ¿Quién te busca? ¡Déjame que te ayude! Preguntaba preocupado por ella el joven.
-     No, no, es muy peligroso, os hará daño, tenéis que iros o ¡correréis un gran peligro majestad!- le contestó muy preocupada Margarita.
-     Está bien, pero mañana volveré a venir, para verte y ayudarte en lo que pueda. – le dijo el príncipe.
-     E…ee….está bien, pero ahora marchaos, ¡marchaos antes de que sea tarde!- le respondió Margarita asustada y asombrada a la vez por el interés que mostraba el príncipe por ella.

         El príncipe marchó por el lado opuesto en el que corría Margarita y Margarita procurando serenarse para que Rufus no la notase tensa se puso otra vez a lavar la ropa haciendo como que no había pasado nada. En ese momento Rufus llegó junto a ella.
         -¿Por qué no me contestabas? ¡Es que no me oías o qué?- dijo enfurecido Rufus. ¿No estarás pensando en huir otra vez verdad?
         - Lo siento señor, no le he escuchado, estaba tan concentrada lavando la ropa que ni siquiera le he oído llegar.- acertó a decir Margarita. ¿Para qué me quiere, señor?
         -Tengo hambre, ¡quiero que me hagas la cena!- le gritó Rufus.

         Y Margarita terminó de lavar la ropa y se fue, acompañada por Rufus en todo momento  a casa.

         Llegó el día siguiente y Margarita apenas había pegado ojo en toda la noche, estaba deseando que el príncipe llegase para contarle todo lo que la había pasado con ese hombre tan malvado y que la sacase de allí en el menor tiempo posible. Pero a la vez estaba tan asustada, por que Rufus la pillase y la escondiese en otro sitio donde nadie jamás la encontrase, que eso la hacía dudar de acudir a su “cita” con el príncipe.

         Pero al final se decidió. Salió de casa y se dirigió al río. Antes buscó a Rufus y vio que estaba ocupado haciendo Dios sabe qué con unas cuerdas y unos alambres. Asique salió como todos los días de su casa sin levantar sospechas y llegó hasta el río.
         Para su sorpresa, allí estaba el príncipe custodiado por un ejército de 20 hombres de la guardia real, que habían venido en el caso de que les necesitasen.

-  Espero que no te asustes, pero ayer me preocupaste demasiado, y entendí que necesitarías ayuda, por eso he traído a mi guardia real. ¿me  quieres contar que te ocurre?
Margarita como sabía que apenas disponía de tiempo, sólo le conto al príncipe que había sido raptada hace muchos años por ese hombre que vivía con ella, que la obligaba a trabajar muy duro y que las veces le la había pillado cuando había tratado de huir, la había dejado encerrada en una habitación sin salir durante varios días y sólo la daba para comer agua y pan.
El príncipe, asombrado por toda la historia que le estaba contando Margarita, la abrazó con todas sus fuerzas y la subió a su caballo, y en compañía de su ejército se dirigieron todos a casa de Rufus para rendir cuentas.
Rufus apenas tuvo tiempo para huir. Le capturaron cuando se disponía a correr entre los matojos y el denso bosque. El príncipe le pidió explicaciones pero Rufus sólo acertaba a decir que se había cobrado su venganza y que por favor le dejasen suelto. Pero de nada le sirvió; el príncipe le apresó y le llevó directo a los calabozos de su palacio.


Margarita por fin había logrado ser libre después de tanto tiempo.
                Cuando llegó a palacio, el príncipe se la declaró explicándola que se había enamorado de ella en el primer instante que la había visto, y que le daba igual que fuese una campesina, que se casaría con ella si ella así lo deseaba. Margarita emocionada y sin poder decirle todavía que era también era una princesa, le abrazó y le besó diciéndole que a ella la había pasado lo mismo y que estaría eternamente agradecida por haberle salvado la vida.
En ese momento acordaron que en tres días se casarían, pues era tal el amor que sentían que no podían esperar más.
Aquella misma noche conoció al rey, a la reina, y a los hermanos de los príncipes, dos chicos mucho más pequeños que él. La familia del príncipe atendió y cuidó a Margarita con todo el cariño del mundo. La ofrecieron comida y una habitación.

Ya en la cena, junto a los Reyes había una mujer muy mayor, muy mayor sentada junto a ellos y mirándola con gran curiosidad. Margarita se sintió atraída por ella, no sabía por qué, pero esa mujer le resultaba familiar. El príncipe se dio cuenta del detalle y dijo:
-Margarita, te presento a la señora Camila, es mi madrina, y madrina de mis hermanos. Hace unos años la encontramos en el bosque, perdida y en muy malas condiciones. Lo único que hacía era llorar y llorar y echarse la culpa por algo que nunca nos contó, ¿verdad Camila?- le hizo con un gesto de cariño, poniéndola la mano en el hombro, y prosiguió.- Nos produjo tal ternura a mis padres y a mí, que decidimos hacerla un hueco entre nosotros como la madrina de mis hermanos, ya que ellos eran muy pequeños.

Margarita en ese momento soltó la cuchara que tenía en la mano y se quedó con la boca abierta. De sus ojos empezaron a salir lágrimas de alegría, se levantó y corrió hacia ella.
-      Señora Camila, ¿no me reconoce? Soy yo, ¡Margarita!
La madrina se quedó mirándola unos segundos a los ojos como intentando creer lo que estaba viendo.
-  Tú eres… tú eres… Dios mío, ¡Margarita!-  la abrazó y la besó y la volvió a abrazar y la volvió a besar.
         Los reyes y el príncipe no entendían nada, no sabían de qué se conocían y Margarita y la señora Camila les explicaron toda la historia. Les dijeron que Margarita era la princesa del reino que estaba más allá de las montañas y que ese hombre que la engañó para que se fuese con él, era el más malo de los enemigos de su padre, el Rey, y que tuvo que huir de su casa para que su familia no corriese peligro.
         Los reyes al conocer la nueva noticia, mandaron invitaciones anunciando la boda de su hijo, a todos los reinados que conocían y también al reinado de Margarita, donde se encontraban sus padres y su hermana.
        
         Él día de la boda, los padres de Margarita no sabían nada, puesto que no habían tenido la oportunidad de hablar y la princesa decidió darles una sorpresa.
         Ya iban sus padres y su hermana de camino a la iglesia cuando Margarita mandó a uno de los soldados que les trajesen al salón de palacio. Los padres y la hermana aguardaban en la puerta preguntándose por qué les habría citado la prometida del príncipe en ese lugar y que querría de ellos.
         De pronto, vieron entrar al otro lado del salón a la futura princesa, una chica guapa, rubia, con un pelo precioso, los ojos castaños y almendrados, y un vestido… Un vestido precioso, con un vuelo increíble y plateado y brillante como la luna. Los padres se quedaron mirándola, callados, sin decir nada, y con una expresión en sus rostros de asombro. A medida que se acercaba la princesa, el corazón les palpitaba más deprisa, y fue cuando ya se encontraban a dos pasos de ella, cuando la reina y el rey soltaron un grito de alegría y entre risas y lloros corrieron a abrazar a su hija que tantos años habían creído muerta.
          Paula, su hermana, se quedo quieta, con los ojos enrojecidos y llorosos  y al cabo de un rato, después de abrazar y besar a sus padres, Margarita se paró, la vio, la extendió los brazos y Paula corrió hacia ella fundiéndose en un abrazo de hermanas como jamás se ha visto.

         Antes de la boda se juntaron la familia de Margarita con la familia de su futuro yerno, y por supuesto la señora Camila. Todos se contaron su historia riendo de alegría y llorando de emoción, y una vez hablado todo, Margarita y Leo, se casaron y vivieron felices para siempre.

         Los padres y la hermana de Margarita se quedaron unos días para disfrutar de su hija, aunque luego volvieron a su reino.

         Margarita les va a visitar de vez en cuando con su marido el Príncipe de Cambolia y con su futuro heredero, el hijo de ambos, el pequeño Ricardo.

         Por otro lado, Rufus, se pudre en los calabozos de Palacio,  en una celda fría y oscura con tan sólo una rata como compañía.